Ciro y los Persas volvieron al estadio de Ferrocarril Oeste. No sólo volvieron si no que también agotaron entradas. Segunda fiesta persa del año, en estadio, con DVD incluido.
.
Casi como un banderazo, un grupo de seguidores, persas y piojosos, cantaban y agitaban los trapos a un par de cuadras del estadio de la calle Avellaneda. Caravanas, hacían la fila para ingresar al campo. La ansiedad se reflejaba en cada mirada, en cada sonrisa.
Con el predio repleto, escenario con pasarela y pantallas gigantes, las luces desaparecieron, y el amo y señor de la noche apareció en escena. Caminando sobre el pasillo del escenario, Andrés Ciro comenzó a entonar a capela Antes y después. Un segundo de silencio, estallaron los acordes, estalló Ferro. No podemos confirmar si tembló el piso, pero…
El encanto para los mas piojosos llego de la mano de Babilonia. «¡Buenas Noches Ferro!» gritaba Ciro, y como un eco veloz las miles de almas presentes le contestaban, entre gritos y aplausos.
Media Caña, y Alejandro Martínez, el pequeño hijo de Ciro, hizo lo suyo en batería para el tema Banda de Garage. Los Mocosos llegaron junto a Tan Solo. Clásico solo de armónica, y el protagonista de la noche, haciendo tomas del público con cámara en mano.
El nacionalismo a flor de piel, y la emoción también cuando llego el turno de Héroes de Malvinas, obvio, el que no salta es un ingles.
Nueva invitada, Katja Martínez, lookeada como en el mismo video subió al escenario a participar de Caminando, más tarde con otro look, colaboró con Me Gusta.
Luego de una desopilante imitación a Guido Kaczka, todos quedaron Como Ali, enseguida se bajaron los decibeles con Insisto.
Las luces se pusieron tenues, y los fantasmas, ingresaron a la pista. Entre esos fantasmas, estaba el mismo Ciro, obviamente cantando Fantasma. La banda persa se instaló en la punta de la pasarela, donde se llevaron a cabo Mírenla, Ruleta y Astros.
Los papelitos de colores estallaron en el aire para acompañar una grata versión de Larga vida al rock, a lo que para los más mayores sonó ¡Hola don pepito!. Nadie dejó de emocionarse con Canción de Cuna. Mix de clásicos piojosos, y prohibido quedarse quieto Zapatos de gamuza azul, Genius, Muévelo, y el Farolito, así sin anestesia, todos juntos.
Se estaban por cumplir casi cuatro horas de show ininterrumpido. Se realizo la religiosa lectura de trapos, sonó Cruel, y como despedida, El Himno Nacional Argentino.
Otra vez los vecinos, cantando y copando los balcones, otra vez Ciro en Ferro. Una vez más con localidades agotadas, una muestra de que lo mejor se puede igualar, y hasta superar.
.
Texto: Mon Romero
Fotos: Jacqueline Orion
***TODAS LAS FOTOS EN NUESTRO FACEBOOK
.
UnderShutter 