Juan Regidor se encuentra presentando, como solista, su último disco «El espejo de los días» que cuenta con 13 canciones propias y recorre géneros como el pop, el rock y el folclore.
Oriundo de la Patagonia, Juan, decidió viajar a Buenos Aires para continuar su carrera musical. Comenzó formando parte de una banda » Camelar» con la cual editó tres discos, luego continuó su camino como solista dando a luz a su primer trabajo «Pinturas en el agua» editado por Universal. Actualmente se encuentra presentando su último disco «El espejo de los días» producido junto a Mauro Tarelli en el estudio “El cono del silencio”.
Un cantautor que poco a poco va construyendo su carrera y que a la hora de definirse lo hace de esta manera: «Soy muy laburador, amo lo que hago y le dedico toda mi energía al arte ya que creo que el camino lo hace uno». Te invitamos a conocerlo en esta nota, en la que hablamos de su último disco, sus próximas presentaciones y muchos más.
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A los 17 años decidiste volver a Buenos Aires ¿Qué te llevo a decidir esto?
Las ganas de hacer mi camino con la música, el sueño de vivir de mis canciones. Es una energía muy fuerte que me impulsa a buscar, arriesgar y esforzarme. En ese momento no sabía bien qué podía hacer o pasar, pero tenía un plan inicial que era estudiar música y grabación en donde fuera posible, y creo que me ayudó mucho eso en los primeros años cuando fui aprendiendo cómo era tener una banda acá, conseguir fechas, grabar discos, lidiar con la ansiedad, etc.
Por otra parte es muy común que en las ciudades del interior uno termina el colegio y se va a una ciudad más grande (capitales) para estudiar, ya que ahí la oferta para formarte es mayor. Así que al haber contado con la ayuda de mi familia para hacerlo no lo dudé.
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Formaste parte de un grupo y luego de a poco te lanzaste como solista ¿Cómo fue ese cambio?
El cambio fue bastante natural, tenía una serie de canciones que no entraban en el estilo que hacíamos con Camelar y en un momento respondí a la necesidad de plasmarlas. Después de grabar el disco las puertas se fueron abriendo para editarlo y tocarlo en vivo, así que le di para adelante con el proyecto.
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Si bien tenes tres disco editados con Camelar, tu primer disco solista fue «Pinturas en el agua» ¿Que diferencia hay con «El espejo de los días»? ¿Notas que para este disco tenes más experiencia?
Totalmente, sé que tengo más experiencia. Me involucro en todos los detalles así que con cada disco que grabo aprendo más y eso suma a la hora de hacer uno nuevo. De todos modos las propuestas fueron muy diferentes para cada disco, con Pinturas en el agua (mi primer disco solista) me propuse grabarlo en mi casa y hacer todo lo que pudiera yo solo, fue una especie de prueba para mí mismo y estuvo buenísimo, gané confianza. Y para El espejo de los días (mi segundo disco solista) me plantee que quería trabajar con un equipo de músicos y con un productor, y que no lo iba a grabar yo; eso también fue bueno, siento que es el disco más auténtico que hice, que es un fiel reflejo de quién soy como músico. Me gusta tanto que no estoy necesitando salir corriendo a componer otro.
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¿Cómo fue el proceso de grabación y composición de este nuevo disco?
Primero compuse las canciones con la guitarra porque me gusta que funcionen así “despojadas”, y desde el comienzo hablé con Mauro Tarelli para producir el disco juntos.
Después fui juntándome con los músicos que me iban a acompañar y a sumar su talento, armamos la base con Nacho Agostini en batería, Pablo Ibañez en bajo y empezamos a grabar en el estudio de Tarelli, El cono del silencio (gran nombre por cierto!) para los demás instrumentos (teclados y guitarras) quería que participaran varios músicos así que fui contactándolos y tuve la suerte de que todos aceptaran, grabaron los capos de: César Silva, Matías Magneres, Guido Briscioli, Guido DiBlasi (desde España) y los hermanos barilochenses Schlichter (Lucia y Ariel). Fue un proceso largo y a veces jodo con que en los discos se te quedan los huesos, creo que hay algo super intenso y significativo en todo ese proceso.
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A la hora de componer ¿Cuál es tu fuerte: Las letras o las melodías?
La melodía (junto a los acordes) sin duda, las letras siempre me hacen sufrir un poco más porque soy bastante reticente a lo que escribo de entrada, así que no me queda otra que laburarlo con tiempo.
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De «El espejo de los días» Lisandro Aristimuño ha elegido un tema que lo incluyo en Música sin fin de lucro ¿Que significó eso para vos?
Significó un montón para mí porque admiro mucho su música y el camino que hizo con ella. Y también porque fue un empujón de difusión. Es muy importante, al menos para mí, que otros artistas más reconocidos apoyen de alguna manera mi laburo si les gusta. Realmente estoy muy agradecido.
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Elegís presentarte en dos formatos ¿qué hay de especial en cada uno de ellos?
En el formato banda podemos hacer sonar las canciones como quedaron plasmadas en el disco y eso es un golazo. Tiene una intensidad y una cantidad de detalles que se disfrutan a pleno.
En el formato solista con loops, se genera una intimidad muy linda con el público, están atentos a lo que voy grabando en vivo y creo que se conectan mucho con el “clima” o la energía de cada canción.
Son dos shows diferentes, y cuando se puede trato de mezclar un poco de los dos formatos.
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Tus próximas fechas son en Liverpool Bar y luego Mar Del Plata ¿Cómo te preparas para esas fechas? ¿Con que nos vamos a encontrar?
En la fecha de Liverpool voy a estar con toda la banda y va a ser un show que recorre mi último disco sobre todo, hay momentos más pop/rock y otros con un aire más folclórico o acústico.
En Mar del Plata voy a estar con el set de loops, va a ser un show íntimo, y voy a mezclar repertorio de varios de mis discos, sumado a algunas versiones de otros artistas como Charly Garcia o Björk.
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